viernes, 5 de agosto de 2011

ZAFFARONI

He vuelto al ruedo, en esta oportunidad me veo obligado a escribir con el fin de expresar desde este espacio mi apoyo al Ministro Raul Zaffaroni.

Esta semana los medios de comunicación le dieron una notoria y malintencionada persecución. La misma se puede deber a muchos motivos, uno de ellos puede ser la interminable lista de enemigos acuñados por las posiciones de sus fallos, vale decir, siempre controvertidos a la postura ordinaria del Poder Judicial en el tratamiento de temáticas ríspidas de la actualidad política, o no es esa la naturaleza jurídica de la Justicia? En qué momento nos creímos la ficción de la imparcialidad de las personas que ejercen un juzgado o un tribunal?

Puede ser tan espontaneo un descubrimiento de la Editorial Perfil e incansablemente repetido por Clarin que constituya una persecución a un juez de la Corte Suprema que en breve debe fallar sobre el Art. 161 de desinversión que establece la ley de servicios de comunicaciones audiovisual?

Los estudiantes de derecho que alguna vez leímos algún manual de él, entendemos lo revolucionario que fueron sus introducciones al sistema legal nacional y su intachable desarrollo en su vida académica y profesional. Para entender la importancia de este magistrado, en la década del ‘80 ya hablaba de criminalización de la pobreza, e impunidad en los actos policiales, ya estudiaba la composición socioeconómica de la cárceles, junto con un puñados de jueces contados con los dedos de una mano se declaró a favor de la tenencia para consumo personal, con ello defendía el inalienable respeto y defensa del ámbito personal del desarrollo humano uno de los institutos más importantes plasmados en nuestra Constitución, por si fuera poco, es el autor de la inconstitucionalidad de la reclusión perpetua, su postura sobre la inconstitucionalidad de la reincidencia.

La presencia de Zaffaroni en el Tribunal Supremo de la Nación, enaltecen y le dan jerarquía internacional a un tribunal de una conformación de excelencia a nivel académico y profesional.

Si todavia les quedan dudas de quien estamos hablando, vean su CV